Sobre la degeneración de la Materia Histórica por Aprendiz de Orión

Por Aprendiz de Orión
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Tiene bastante tiempo que no realizo una reflexión sobre la HISTORIA en sí, y no sobre la historiografía (lo que se ha escrito sobre determinado tema). Pero dándole sus respectivas vueltas de tuerca al asunto he llegado a tener que propinar (con cierta dureza) algunos puntos que más que estar haciendo apología a la introducción al estudio de la historia más bien los enfoco a ALEJARSE de ella a toda forma de vida bípeda: carente de sentido común (me vale sorbete el sentido común de la época), optimistas (¡si!), mercenarios (vendidos, oficialistas, como sea…), analfabetas (en sentido ideológico), y un largo etcétera que si me propusiera listar a cada degenerado no acabaría NUNCA.

Bastantes autores tanto nacionales como extranjeros se han dado a la tarea de escribir sus propias apologías a la historia, donde por medio de la práctica y la experiencia que han adquirido, nos ofrecen una pauta a seguir para adentrarnos en el estudio FORMAL y ACADÉMICO de la materia histórica. Por lo tanto no espero escribir en esto que quiero compartir con ustedes mi propia apología, pues bastante desgastante es tratar de convencer a un necio vulgo del porque debería versarse en estudios históricos básicos, que dicho sea de paso, nos ayudarán a estar más cautos a la hora de desenvolvernos como sociedad y en ámbitos públicos como la política.

¿Porque me molestan los "optimistas"?

Es de lo que he querido encargarme primero que nada porque esa actitud de "tiene sus cosas buenas y sus cosas malas" o la clásica "estudiemos la historia para no repetirla" se repiten como dogmas por aquellos "moderaditos" que le tratan de ver lo bueno a asuntos que a leguas se nota que apestan y bastante mal. Nos damos cuenta de que desconocen que a lo largo de toda nuestra humanidad la historia se ha convertido en una especie de bucle que se va repitiendo una y otra vez para la eternidad; solo cambian los rostros y la temporalidad, eso del progreso es una mera ilusión (como eso de "la paz). Si bien es cierto que debemos saber mirar a la historia como materia de su tiempo no debemos perder el piso y  dejar pasar asuntos incómodos para no afectar la "imágen" de ciertos personajes o "causas" del pasado.

Los analfabetas ideológicos son aquellos que por ejemplo, le llaman "fascista" o "nazi" a aquellos individuos que dicen cosas con las que simplemente no están de acuerdo; intentan silenciar los a cualquier costo, no necesariamente son "fachas" (fascistas) o nazis los contrarios. Actúan de manera paradójica al intentar meter en cintura a todo aquel individuo que no piense como ellos, ya sea de forma colectiva o hasta legalmente; afirman luchar contra el "totalitarismo" y la "represión" pero reprimen la forma de pensar de otros. DE RISA. Esos son de los más peligrosos por sus argucias legales y de dudosa "moralidad" (que tanto defienden). Principales difusores de mentiras y mitotes históricos por sus masivas acciones en las redes sociales cibernéticas (compiten directamente con las secretarias de educación públicas).

No es ningún secreto que como sociedad hallamos perdido el piso desde hace mucho tiempo. Son cada vez menos los individuos con sentido común entre nosotros; la masa se deja llevar por las ideologías y los mitotes por lo que no esperemos poder hacerles entender la materia histórica por la buena (menos por la mala) es mejor dejarles que a su debido tiempo se den cuenta de sus errores y rectifiquen en materia histórica (no histérica). A todos nos puede pasar cometer garrafales errores de jovenzuelos pero existen también a los que les gusta vivir del error por conveniencia ($), así con todo ese entusiasmo muchos de estos degenerados pasan a "digievolucionar" (!) en otros individuos más despreciables aún como los mercenarios oficialistas, una suerte de tipos que se dieron cuenta que la historia es un negocio redituable si sabes tejer redes de compadrazgo dentro del gobierno y tienes labia para escribir y/o decir disparates que ayuden a los gobiernos a seguir perpetuandose en donde están.

La historia tiene muchos enemigos, no sé si llamarles naturales, pero de qué son feroces lo son. Y para nuestra mala suerte muchas veces terminan depredandola hasta hartarse. Se ha llegado a decir con justa razón que "la primera víctima de la guerra es la VERDAD", la historia es víctima de nuestros tiempos; en las guerras MODERNAS que ya no son las de trincheras y grandes ejércitos matándose unos contra otros, (y esperando a surgir un ganador para escribir la nueva historia) está permanentemente en el ciberespacio donde de cierta forma TODOS SOMOS IGUALES sabiendo como navegar, por lo que la historia se ha plagado de esos depredadores de los que he hablado, pero en mayor número y voracidad que antes.

Cuidemos de no caer en las garras (o de convertirnos en alguno) de estos degenerados, que nos tratarán de convencer por todos los medios a su a su disposición, la mejor herramienta para evitarlos es la propia lectura y el discernimiento (crítica de fuentes). Las mejores herramientas son los balances históricos y nuestro sentido común.